agosto 20, 2009

Medio día


El calor agonizante del medio día

se niega a morir ante la sombra

de grandes nubes grises,

sus gritos amarillos se esparcen

por el aire junto a las

últimas partículas del verano,

el azul, desteñido y desalentado

se desvanece, mientras algunas

gotas minúsculas se acercan

a la tierra con la ingravidez

de una pluma fantasma.

Fantasmas


…una vez más, recuerda que te quiero, que te creo, que te presiento, que me inspiras tanta confianza como el viento y que aunque en algunos momentos tu presencia me sea inaprehensible, mi fantasma se queda siempre con el tuyo, mientras hacemos creer a los demás que aún estamos vivos…

Dios


Cuando terminé la secundaria, Dios me caía mal,

pero un tiempo después comprendí que lo que en realidad

no soportaba era la idea desteñida y hostil de Dios

que me había quedado después de tanta doctrina religiosa

que le aportaba tan poco a mis motivaciones.

Ahora, que puedo ver a Dios hasta en la muerte,

me siento liberado de esa carga tan pesada

que era odiarle con rebeldía y perderme la oportunidad

de sentirle en cada respiro.

Ahora me pregunto si los que dicen odiarle

y los que en verdad lo hacen, padecen de esa misma

anemia espiritual a la que tanto

contribuyen ciertos maestros, presidentes, obispos,

papas e hipocresías morales milenarias...